4.793.283 resultados, 29.450.556 comentarios, 1.037.175 imágenes, 80.044 vídeos, 86.434 noticias

Un Basilea sorprendente, noquea a todo un Bayern conservador.

Un futbol excesivamente conservador del Bayern Munich, termina por sucumbir ante un sorprendente Basilea, que desplegó un juego fresco y ágil. Un partido de vuelta prometedor.

Hace 12 años por Taurion
Escudo del F.C. Basilea

Escudo Basilea

Miércoles 22 de Febrero de 2012 - Estadio: St. Jakob Park

El Basilea da la sorpresa al imponerse al Bayern de Múnich, en la ida de
los octavos de final de la Champion League, en un choque en el que podríamos
destacar la actuación del portero Sommer.

A los 11 minutos Ribery propinó un disparo que puso en jaque a Sommer,
que con una gran estirada hizo que no subiese al marcador, el primer gol del encuentro.
El Basilea, por su parte, dispuso de alguna de las mejores ocasiones del primer tiempo.

Dragovic, al minuto 16, remató un preciso balón de cabeza que, de no ser por Neuer y el poste,
habría supuesto el primer gol local. Unos cuatro minutos más tarde, otro esférico estrellado en
el larguero, después de un magnífico chut de Alex Frei, volvió a negarle el primer gol al Basilea.

Los dos equipos jugaron como habitualmente lo hacen y ofrecieron una primera mitad llena
ocasiones de peligro. El empate a 0 goles con el que se llegó al final de los primeros
45 minutos, no detallaba la cantidad de ocasiones que tuvieron uno y otro conjunto. Tal vez alguna más el Basilea, por el excesivo juego conservador del Bayern.

Reanudado el encuentro, templados los ánimos tras el merecido descanso, el Bayern, empezó a dominar la situación, haciéndose acreedor del balón, llegando a picos de un 68% de posesión.
Fueron entonces los mejores minutos de los alemanes, que empezaban a crear algo de peligro, poniendo a prueba a un gran portero Sommer que, en el minuto 69, a tiro de Lahm, desbarató una gran ocasión de los alemanes.

Tal vez, de haber jugado así el Bayern durante el primer tiempo, el resultado final, habría sido otro, pues con tanto conservadurismo, pasó lo de siempre, cuando más tenían los alemanes controlado el partido, por el minuto 86, Stocker batió vergonzosamente (gol entre las piernas) al meta Neuer, a pase de Zoua.

Heynckes, frunció el ceño y torció el gesto en un alarde de impotencia, viendo que ya no había tiempo para más, sabedor que, en el partido de vuelta, valga la redundancia, debe dar la vuelta al marcador, si o si, ya que de otra forma, saltaría una de las grandes sorpresas de esta Champions League.