El Real Madrid es el Robin Hood de la Liga

De hecho, a estas alturas de la Liga el equipo de José Mourinho sería líder de haber ganado en casa contra Sporting y Zaragoza, y fuera habiendo sumado tres puntos en Pamplona, o en los estadios que empató: Mallorca, Almería, A Coruña y en el Ciudad de Valencia.

Esto demuestra que el Real Madrid no le tiene tomada la medida a los denominados equipos 'pequeños' y sus pinchazos no han sido en los estadios de los equipos punteros de la Liga BBVA, sino contra conjuntos que, en condiciones normales, se encuentran alejados de los puestos de privilegio.

De hecho, todos están luchando por no descender y uno de ellos, el Almería, ya es matemáticamente de Segunda División tras su última derrota ante el Getafe.

Empates que se pagan

Uno de los tópicos más repetidos a lo largo de la historia del fútbol es aquel que dice que las ligas se ganan en los campos de los equipos pequeños, no en los grandes escenarios. Si nos fijamos en los tropiezos del conjunto blanco durante la temporada, este tópico se convierte en una realidad que puede dejar fuera de la lucha por el título al Real Madrid.

Ocho de sus diez tropiezos han tenido lugar en los estadios de equipos que están situados por debajo de la mitad de la tabla. Sólo el 5-0 del Camp Nou y el empate en el último Clásico del Bernabéu es el otro lunar en la trayectoria blanca.

Mallorca y Sporting repitieron

Los hombres de Pep Guardiola mostraron más consistencia contra los modestos, especialmente a domicilio, aunque sus dos únicas derrotas fueron con el casi descendido Hércules, en la segunda jornada, y ante la Real Sociedad hace dos jornadas. Además, empataron con el Sporting en Gijón y ante el Mallorca en el Camp Nou.

Eso sí, el Barcelona a falta de su visita al Ciutat de Valencia donde puede certificar el título si empata, ha 'destrozado' literalmente a los rivales contra los que su eterno enemigo, el Real Madrid, ha perdido o empatado. Almería (0-8), Osasuna (0-3), Deportivo (0-4) y Mallorca (0-3), han visto como los puntos volaban de su estadio camino de Barcelona