Así serían las plantillas de FC Barcelona y Real Madrid sólo con canteranos

Si los dos grandes clubes de España quisieran montar unas plantillas solamente con jugadores que hubieran pasado por sus filiales en algún momento, esta sería un posible configuración.

Hace 11 años por rojiblanco
Real Madrid y Barça con jugadores canteranos

Real Madrid y FC Barcelona tienen posiblemente las dos canteras más prolíficas de España, con el permiso de otras grandes fábricas como las de Osasuna, Sporting, Athletic o Villarreal, entre otras. Pero ambos clubes han mantenido políticas muy distintas para gestionarlas. Mientras que los culés han dado entrada a muchos de esos jugadores para el primer equipo, los blancos han adoptado la táctica de vender aquellos jugadores sin sitio en el Real Madrid a buenos precios, inlcuyendo en muchos casos claúsuas de recompra.

Esas políticas llevan a que hoy, de una posible plantilla de 25 canteranos el Barça mantenga a 15 en casa por solo cuatro del Real Madrid. En ambos casos ha habido 'repescados' de otros clubes: Piqué, Cesc o Jordi Alba por el Barcelona y Granero, Arbeloa o Callejón por el Madrid.

Distintas prioridades

Si miramos línea por línea, vemos que el Barcelona se ha especializado en producir centrocampistas de toque: Xavi, Iniesta, Thiago, Arteta, Romeu, Cesc o incluso Messi son algunos de esos ejemplos. Minetras tanto, el Real Madrid ha destacado por sus atacantes: Soldado, Negredo o Raúl son los grandes exponentes, aunque también tuvieron 'jugones' que pasaron por Valdebebas sin llegar a hacerse un hueco en el Bernabéu: Borja Valero, Mata o Jurado son algunas muestras.

En ambos casos destaca la producción de porteros, ya que Valdés, Reina, Casillas y Diego López pueden ser los mejores cuatro cancerberos españoles de la actualidad, con permiso de David De Gea.

El caso Trashorras

El de Roberto Trashorras es uno de los casos más curiosos. Se formó en las categorías inferiores del Fútbol Club Barcelona y llegó a debutar en el primer equipo, pero con la llegada de Joan Laporta a la presidencia culé obtuvo la carta de libertad para acabar recalando en el Castilla, pero nunca llegó a jugar en el equipo blanco de Primera División. A partir de ahí, una larga peregrinación por Numancia, Las Palmas, Celta y ahora Rayo, con el que ha vuelto a la Liga BBVA.