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El Panathinaikos escenifica un drama griego para eliminar al Barça

Conscientes de su inferioridad técnica, los griegos decidieron convertir los partidos en auténticas batallas

Al Panathinaikos le interesa crispar la eliminatoria ante el Regal Barça y ya lo logró en los encuentros disputados en el Palau

Al Panathinaikos le interesa crispar la eliminatoria ante el Regal Barça y ya lo logró en los encuen

Acostumbrados desde hace siglos al drama, los griegos se mueven mejor que nadie en este tipo de escenarios. De ahí que traten de convertir cualquier situación en algo terminal en el que está en juego la vida o, como mínimo, el futuro de los protagonistas. Gozan de los dramas como nadie y se adaptan pertectamente a situaciones límites. Ya sean provocadas por ellos o llegadas del exterior; fortuitas o derivadas de su mala cabeza económica como el rescate europeo imprescindible ante su incapacidad de gestionar la crisis. Sea como fuere, Grecia vive a gusto con el drama. Y el basket griego, por supuesto, también. Al drama se acogieron para aumentar sus posibilidad de eliminar al Regal Barça. Y, por el momento, no les va del todo mal.


Después de los dos primeros partidos (1-1 en el marcador y la seguridad de que habrá por lo menos dos más) tanto Zeljko Obradovic, que no es griego pero lo parece porque a sus excelentes planteamientos tácticos une el histrionismo del drama, como los directivos del Panathianaikos y, por supuesto, sus seguidores ya han sacado buena parte de su arsenal.


Repasemos lo que ha sucedido estos días. El martes, pocas horas después de la primera victoria barcelonista, un par de individuos con la cara cubierta por sendos pasamontañas quemaron un bar de Atenas, concretamente en el barrio de Agios Dimitrios. Con el establecimiento cerrado ?eran cerca de las dos de la madrugada? no hubo desgracias personales, pero los daños son importantes. Sería un caso más de inseguridad ?que afecta a todas las ciudades? si no fuera porque el establecimiento es propiedad de Cristos Rigas y Cristos Rigas es hermano de Costas Rigas, director arbitral de la Euroliga y al que el Panathinaikos señala como artífice de todos sus males, comenzando por su millonario presidente, Thanasis Giannakoloulos, que hace dos años y durante la Final Four de Berlín tuvo la desvergüenza de interrumpir la final (CSKA Moscú-Panathianiakos) lanzando desde el palco de autoridades billetes a unos árbitros que consideraba se estaban moviendo por el dinero recibido.


El incendio fue el martes pero, el miércoles, los griegos le echaron más argumentos al drama. Descubrieron un espionaje blaugrana y realizaron una reclamación. Según explica el medio ateniense www.gazzeta.gr, el Panathinaikos detectó en el Palau Blaugrana una cámara, oculta entre toallas, que grababa la sesión de entrenamiento de Obradovic para conocer los planteamientos del serbio. La prensa griega dice tener pruebas sólidas: el Barça conocía los sistemas que el técnico serbio había diseñado en exclusiva para el segundo partido. No parece que jurídicamente se sostenga la acusación, pero como elemento para aumentar la tensión del drama no deja de tener su importancia.


Como todo va a valer hasta el jueves ?con martes? incluido porque está claro que el Panathinaikos decidió escenificar un drama griego para eliminar al Barça. Y en eso está.
Zeljko Obradovic recriminó los gritos del Blaugrana
Con experiencias en Badalona y en Madrid, Zeljko Obradovic conoce bien tanto el catalán como el castellano.


Por ello entendió perfectamente los gritos que se oyeron en el Palau, siempre mucho más dignos que los habituales de Atenas. Pero a Obradovic no debieron gustarle algunos porque en un momento del tercer cuarto del segundo partido se encaró con la grada elevando sus brazos y dirigiendo sus dedos a sus oídos, pidiendo más al más puro estilo Cristiano Rolando. Lo que sucede el martes y el jueves en el OAKA a Obradovic le parecerá perfecto porque ya se encargará él de aumentar al máximo la tensión

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