En el Mini Estadi, el Barça B baila al ritmo del Betis

Contundente. Ese es el adjetivo que califica al Real Betis hoy en su excursión al Mini Estadi del Barça B. El aficionado esperaba un partido reñido y complicado seguramente, pero el Betis la hizo sencilla y al final del primer tiempo ya tenía sentenciado el partido. Los fantasmas del 2-2 de la primera rueda sobrevolaron durante el entretiempo, pero con un terrible golazo de Iriney puso cifras definitivas y los 3 puntos se fueron para Sevilla.

Pintaba para complicado. Se sabía que el Barcelona B iba a ser un duro escollo de pasar para el Real Betis, que jugaba presionado sabiendo que el Rayo Vallecano había triunfado 2-0 ante Las Palmas ayer y que el Celta había tropezado con la Ponferradina, a la cual no pudo vencer. Además los tres meses de imbatibilidad del equipo blaugrana hacían peligrar las aspiraciones del equipo verdiblanco.

Y así parecía en los primeros minutos, en los que el Barça B fue una aplanadora que trató de llevarse puesta a los sevillanos. Prácticamente no los dejaban salir de su campo, y la polémica se hacía presente en una jugada en la que el Pichichi Jonathan Soriano fue tumbado por Miguel Lopes en el área cuando se prestaba a convertir y el árbitro no pitaba nada. Queda para la duda, lo cierto es que si el penal era cobrado tal vez la historia hubiera sido otra.

Con el correr de los minutos el Betis fue emparejando las acciones y sacándole la pelota al local. Lentamente lo fue maniatando y arreándolo hacia su campo. Y el guardavalla Olier comenzaba a preocuparse. Beñat ya avisaba con un disparo de tiro libre que varios lo vieron adentro, lo cierto es que el balón pasó a escasos metros del arco.

Pero ese era el prólogo, ya era evidente que el Betis tenía controlado al local, pero sólo le faltaba convertir. Y ahí hizo su aparición Juanma, el volante por derecha del verdiblanco. Cuando ya promediaba la primera parte, aprovechó un error al intentar despejar de la defensa blaugrana, tomó el balón por derecha con espacio para avanzar, entró al área y tiró el pase al medio para que apareciera Rubén Castro, que con una gran precisión cruzó el disparo para poner el 1-0 para los de Mel.

Y cuando ya se estaba en tiempo de descuento, otra vez Juanma por derecha, tiró una gran habilitación entre líneas para Jorge Molina, quien disparó cruzado y para su fortuna el balón se elevó tras rozar un defensor rival y fue inatajable para Olier. 2-0 y final del primer tiempo.

La incógnita era saber si el Betis lograría aguantar el resultado. Pero en el segundo tiempo lo confirmó: siguió conteniendo al rival, y en otra aprovechada Iriney robó un balón en tres cuartos cancha, encaró hacia el área y y con un terrible derechazo cruzado puso cifras definitivas al resultado, 3-0.

El Betis pudo haber convertido alguno más, es verdad. Pero lo cierto es que terminó bailando al Barça B en su cancha y se afianza en la carrera hacia el ascenso. Jugando así, su afición tiene motivos suficientes para ilusionarse con su pronto regreso a las ligas mayores.