Los seguidores de cualquier equipo de fútbol o de un determinado futbolista cuentan con unos niveles de abundante información. Cualquier noticia, por insignificante que parezca, aparece al momento en cualquier portal digital. O en las redes sociales. O bien son los protagonistas los que publicitan sus aficiones o sus contratos publicitarios con una determinada marca. Esto sucede, por ejemplo, con la creciente afición de muchos futbolistas de renombre con el póker. Bien dan publicidad a este histórico juego de póker o se encargan de airear, a través de las redes sociales, sus triunfos con los naipes. Lo bueno de esto es que cualquier mortal puede compartir aficiones con este juego de azar: te puedes descargar juegos de póker gratis en español y emular a tus ídolos del balón.
El póker está considerado por los jugadores como una opción más de entretenimiento, bien cubriendo las horas de concentraciones en hoteles a la espera de un encuentro de la máxima exigencia deportiva o porque es una salida en su tiempo de ocio. Otros, como veremos, ya lo llevan a un terreno más monetario. ¿Por qué este juego de naipes está teniendo tanto protagonismo entre algunos jugadores de fútbol? Aparte de lo comentado, básicamente porque es un juego en donde se mantienen unos altos nivel de competitividad. Todos los que se sientan a una mesa de tapete verde desean llevarse el premio económico. Esto hace que la adrenalina cuente y mucho.
Relación entre póker y fútbol
Lo mismo sucede con las emociones. Las propias deben controlarse y deben saberse interpretar los sentimientos que los oponentes tratarán de ocultar. Por no hablar, lógicamente, de la estrategia a utilizar, la cual puede verse modificada sobre la marcha, hay que adaptarse a según cómo vengan los naipes, ya sean nuestro o de los adversarios. En ciertas líneas generales, hay cierta relación entre el póker y el fútbol: competición, adrenalina, control emocional y saber elegir la mejor táctica para imponerse a la táctica del contrincante. No obstante, algunas personas consideran que los futbolistas no deberían descentrarse en partidas que no inculcan valores. Son los menos, máxime porque el póker no es un simple juego de azar. No es esperar que salga un número y sea el nuestro, sino que hay que saberse las cartas, sus combinaciones y todo lo comentado anteriormente, pasando por una curva de aprendizaje.
Es decir, el póker otorga cuantiosas ganancias, pero a ese nivel no llegan todos y si se llega se hace con muchos años de experiencia y de partidas jugadas. En definitiva, que muchos jugadores se manejan con las cartas con la misma soltura que con el esférico. Que para ellos, los futbolistas profesionales, el póker abierto, el póker surtido, el póker cerrado están a la orden del día. Antes, más partidas presenciales que en la actualidad, donde domina echarse una partida online.
Si hablamos de futbolistas y póker, hay un nombre que viene rápidamente a la mente. El defensa del Barcelona, Gerard Piqué. El central ha demostrado su habilidad con las cartas en más de una ocasión, como ha dejado constancia en sus redes sociales. Y no es cuestión de presumir, puesto que se puede decir que Piqué es un buen jugador de póker, pues quién no recuerda los 130.000 euros que se llevó al terminar tercero en un torneo, que se celebró en Barcelona. Otras veces, como sucede en este juego, le habrá tocado perder. Otros jugadores en activo que ha mostrado sus simpatías hacia el póker son el brasileño Neymar, tanto participando en partidas de cartas como prestando su imagen, a cambio de un buen dinero, a determinadas marcas relacionadas con el juego. Como también ha hecho otro icono del balón como Cristiano Ronaldo. Dani Alves, Vardy o Buffon son otros jugadores famosos que han reconocido sus gustos y habilidades por las cartas de este juego.
Esos jugadores son un poco la excepción, puesto que, en muchos clubes, y en aficionados, no está bien visto este tipo de habilidades. Por ejemplo, el alemán Max Kruse. Este internacional por Alemania, que milita en el Unión Berlín, ha tenido más de un encontronazo con los directivos del equipo a consecuencia de su afición por las cartas.
Jugadores retirados, profesionales del póker
La relación entre futbolistas y póker va más allá. Y es cuando muchos muestran sus gustos por el póker sin ningún tipo de temor. Muchos profesionales dejan el balón aparcado y se abren camino sobre el terreno de las cartas, como ha sucedido con el inglés Teddy Sheringham. El que fuera delantero del Manchester United, equipo con el que ganó la Copa de Europa, cuenta con más de una década como jugador profesional del póker. Y no le va nada mal en cuanto a ganancias. Otro que está a la par es el sueco Thomas Brolin, capaz de llevarse 40.000 euros en una partida de cartas después de haber escrito una gran trayectoria con el esférico, ya fuera con la selección de Suecia o militando en varios equipos de Italia e Inglaterra. El histórico Tony Cascarino es otro ejemplo de este traspaso de profesiones. En sus triunfos con las cartas, cuentan que se ha llevado medio millón de dólares. Nada mal. Menos recorrido han tenido otros jugadores como el italiano Vieri o el ucraniano Shevchenko.
Otro caso muy destacable es David Beckham, toda una institución del fútbol tras su periplo de éxitos en la selección de Inglaterra y en los equipos, entre otros, de Manchester United y Real Madrid. Además, hay que recordar que fue nombrado Sir. El que fuera centrocampista inglés no sólo se ha dejado ver en alguna partida de póker, sino que ha invertido en temas relacionados con el juego y ha prestado su imagen a modo publicitario. Las cifras no son públicas, pero seguramente se haya embolsado un buen dinero. En resumen, este juego de cartas sirve de entretenimiento para los jugadores en términos de competitividad, estrategia y emociones; de entrenamiento mental; y, una vez que dejan de lado el balón y la competición, de una salida profesional o empresarial.
