Betis 3-0 Osasuna, El Lider es Dani Ceballos.

El Betis consiguió una importante victoria ante Osasuna, gracias a Dani Ceballos. El canterano salió en la segunda parte para cambiarle la cara a un equipo bético que se había arrastrado durante los primeros 45 minutos. Pepe Mel intentó mejorar la imagen de las últimas jornadas con un cambio de sistema, pero el experimento duró diez minutos y el Betis volvió a verse superado por un rival de la zona baja de la clasificación. Los verdiblancos no vieron peligrar su portería, pero sí estuvieron a merced de un Osasuna que, por supuesto, no sufrió en defensa. Entonces Mel decidió sacar a Ceballos tras el paso por los vestuarios y el canterano revolucionó a sus compañeros. Toda la falta de actitud hasta entonces se transformó en intensidad, la cual acompañó de calidad Ceballos, que pronto puso en bandeja el 1-0 a Ndiaye. Rubén Castro haría el segundo y Molina redondearía el marcador para un Betis que mantiene el liderato y que ya tiene muy lejos a rivales como Las Palmas y Valladolid.

La primera parte fue soporífera, algo que, desgraciadamente, ya se ha convertido en un clásico. El Betis salió dormido y plano, a pesar de que Pepe Mel intentó hacer reaccionar al equipo con un cambio de sistema. Apostó por Cejudo en una banda, con Rubén Castro en la otra, Portillo por dentro y Molina de delantero centro. Pero el experimento sólo duró diez minutos, el tiempo en el que el técnico bético se dio cuenta de la superioridad de Osasuna. Porque la realidad es que el cuadro navarro era el que tenía la pelota y, aunque no llegaba a la portería de Adán, sí se tenía la sensación de que podía ser el único en hacer gol. El Betis, por su parte, estuvo fallón en todas sus líneas, con jugadores tirando la camiseta (Molinero, Jordi, Cejudo?), y una falta de actitud preocupante. La plantilla bética no es ninguna maravilla, pero ya ha demostrado ante los rivales directo que sí da para algo más que los ridículos que viene haciendo.

Y el ejemplo más claro de la falta de actitud fue la segunda parte. Con un único cambio en el descanso, el Betis cambió radicalmente. Ceballos saltó al césped en sustitución de Cejudo y le cambió la cara totalmente al equipo. Aparte de su calidad, que es indudable, lo que más aportó fue ganas, intensidad, rabia. Corrió y contagió a sus compañeros para hacer lo mismo, lo cual pronto se transformó en el dominio total del partido. Y eso, en la mayoría de los casos, es sinónimo de gol. Y así fue, a la media hora de partido, con Ceballos en plan estrella, Ndiaye abrió el marcador gracias a un pase del canterano, que ya antes había comenzado la jugada con un cambio de juego de pelotero caro. Corrían entonces los mejores minutos de un Betis que tenía noqueado a Osasuna. Faltaba rematar la faena, que no se bajara la intensidad, y a los seis minutos del primer gol llegó el segundo. Rubén Castro, que había estado muy mal durante todo el encuentro, recogió un balón dentro del área para introducirlo en la portería de Riesgo. El Betis, por fin, lo tenía todo de cara. Faltaba aguantar el resultado y, aunque hubo un gol anulado a Osasuna, los visitantes apenas inquietaron a Adán. Es más, Molina redondeó el marcador con el tercero en la recta final. La victoria, gracias en un porcentaje muy alto a Dani Ceballos, le sirve al Betis para mantener el liderato y, de paso, ampliar distancias con algunos de sus rivales directos. Valladolid y Las Palmas ya ven a los verdiblancos desde lejos.